La selección disputó un amistoso en Mercedes a beneficio de Dolores

El gimnasio Mario Eduardo Bellini, del Club de Remeros Mercedes, lució repleto este sábado de noche para observar un encuentro cuyo resultado fue una anécdota. La selección uruguaya de básquetbol, que se prepara pensando en el Sudamericano del mes que viene en Venezuela, derrot-ó 90-69 a un equipo formado por jugadores de Soriano y otros invitados.

Gustavo Barrera, Luciano Parodi, Bruno Fitipaldo, Alejandro Acosta, Emiliano Serrés, Federico Haller, Bernardo Barrera, Imanol Asaravicius, Gonzalo Díaz, Reque Newsome, Kiril Wachsman, Gonzalo Iglesias, Hernando Cáceres y Mathías Calfani fueron los celestes que tuvieron minutos, y Parodi resultó el goleador con 14.

Marcos Marotta, Facundo Siniestro, Juan Manuel Garbarino, Gastón Semiglia, Demian Álvarez, Emiliano González, Matías Silva, Cristian Tisierre, Nicolás Olivera, Nicolás “Quilla” Barrera, Guillermo Bruni y Sebastián González formaron parte del combinado local, que estuvo dirigido por Hugo Guillenea e Ignacio “Nacho” Borges.

Todos los parciales (29-17, 59-35, 82-50) se los llevó el conjunto dirigido por Marcelo Signorelli, que salió al rectángulo con una pancarta de apoyo al niño Renato Banchero, doloreño que sigue internado en el Sanatorio Americano de Montevideo por las heridas sufridas durante el tornado.

El motivo del evento, para el que se vendieron 1.300 entradas, fue recaudar fondos para la reconstrucción del Club Peñarol de Dolores, que quedó devastado por el tornado que arrasó la ciudad el 15 de abril pasado.

Desde la organización se dijo a Montevideo Portal que entre entradas, cantina, rifas y remate de camisetas, se recaudó “en el entorno de los 200.000 pesos, que al menos da para arrancar con las obras”.

En el gimnasio de Peñarol de Dolores las pérdidas fueron totales, dado que el techo se voló y las paredes cayeron hacia adentro, y se estima que volver a dejarlo como antes cuesta aproximadamente 200.000 dólares.

La intención de los dirigentes es construir las paredes y arreglar el piso para empezar a utilizar la cancha sin techo desde la próxima primavera. De momento, los casi 100 niños que practican en el club realizan sus entrenamientos en las instalaciones del Bella Vista (que no sufrió el tornado) y en el estadio cerrado municipal.